Más de dos semanas tienen los vecinos de algunos municipios del estado Carabobo sin suministro de agua: Esto debido a una falla eléctrica que causó la explosión de varios equipos en la planta Pao I La Balsa y que, en principio, solo afectarían a los municipios San Diego, Los Guayos, Carlos Arvelo, Guacara, San Joaquín y Diego Ibarra, pero la falla se extendió a Valencia y Naguanagua.
Padres de familia hacen largas colas en los principales llenaderos de la ciudad con tobos y botellones tratando de correr con la suerte de llevar algo de vital líquido a sus hogares.
La situación se ha prestado para la venta a sobreprecio. Los camiones cisternas, según efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana que intentan mantener el orden en los llenaderos, no deberían cobrar más de 300 mil bolívares. Sin embargo, vecinos comentan que les han presupuestado camiones en 750 mil bolívares, esto si el camión cuenta con gasolina para trasladarse.
Otra solución que han encontrado en algunos hogares es la compra de botellones de agua potable que económicos se pueden conseguir entre 700 y 900 bolívares, sin embargo en algunos sitios cobran hasta 1000 bolívares, y si no tiene la tapa plástica cobran 1500.
Según reseña el diario El Carabobeño, en Guacara una madre de familia, Luzmar Galindo, baña a su hijo de un año en una bañera con agua potable, la guarda y posteriormente la usa para bañarse ella y después es destinada para la limpieza de los inodoros.
Este miércoles, según informó el gobernador Rafael Lacava, está previsto que se inicie los primeros bombeos de prueba en las tuberías de todo el estado, posteriormente habrá que esperar 48 horas para que se regule completamente el suministro.
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