Representantes del oficialismo, empresarios, trabajadores y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) iniciaron la cuarta ronda del diálogo social que desde el 2022 busca acordar un mecanismo para fijar el salario mínimo en Venezuela, (ubicado en 130 bolívares actualmente) y la liberación de líderes sindicales detenidos.
El encuentro, que inició el pasado jueves 1 de febrero hasta este viernes 2 en Caracas, se llevó a cabo en medio de reiteradas exigencias de trabajadores activos, jubilados y pensionados a la administración de Nicolás Maduro por un aumento en el salario mínimo, cuyo incremento más reciente sólo fue incluido en el ingreso mínimo indexado (bonos y cestatickets).
En esta cuarta ronda, participó la Central de Trabajadores Alianza Sindical Independiente (Central ASI), junto a la Confederación General de Trabajadores de Venezuela (CGT), además de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (CBST) por el oficialismo.
Por el sector empresarial estuvo presente el comité gerencial de Fedecámaras, mientras que por la administración de Maduro intervino el ministro del Trabajo, Francisco Torrealba y por la OIT, el consejero especial Christian Ramos.
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La OIT monitorea el cumplimiento de los convenios 26° sobre la fijación del salario mínimo, la libertad sindical y la protección del derecho de asociación (87°) y la consulta tripartita en el país (144°) que no ha tenido mayores avances excepto la instalación de una mesa técnica para discutir el tema.
El presidente de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (CBST), Wills Rangel, dijo en declaraciones al canal VTV que esperan “engranar propuestas” a fin de que el sector privado pague el bono de alimentación a los trabajadores con el monto establecido por el oficialismo.
Asimismo, Rangel indicó que durante el inicio de la cuarta ronda del diálogo tripartito abogaron por el cese de las sanciones contra la administración de Maduro.
Mientras tanto, voceros de la instancia que integra a distintos movimientos y organizaciones de la sociedad, Foro Cívico, exigieron que el diálogo social sea “efectivo”, genere acuerdos concretos y que detenga la persecución y hostigamiento a los trabajadores que reclaman reivindicaciones salariales.
“La OIT no se puede dar el lujo de dejar que Venezuela se burle de ella”, manifestó Keta Stephany, delegada de la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) y miembro del Foro Cívico.
Con la grata compañía de la #OIT seguimos avanzando en el marco del #ForoDeDiálogoSocial en virtud de conseguir métodos acordes a la realidad que tenemos en Venezuela con respecto al mundo del trabajo, para ellos contamos con la participación de todos los actores de esta área. pic.twitter.com/gp9d5K9SId
— Francisco Torrealba (@torrealbaf) February 1, 2024
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