El secretario general de Estados Unidos, Antony Blinken, indicó que la rebelión del Grupo Wagner desvela “grietas importantes” en la autoridad del presidente ruso, Vladimir Putin. Aunque los paramilitares regresaron a sus bases, el político destacó el aumento de las tensiones de manera interna en el Kremlin.
“Si pones esto en contexto, hace 16 meses Putin estaba a las puertas de Kiev en Ucrania buscando tomar la ciudad en cuestión de días, borrar el país del mapa. Ahora, ha tenido que defender Moscú, la capital de Rusia, contra un mercenario de su propia creación”, indicó Blinken en entrevista para ABC.
El secretario indicó que Estados Unidos está enfocado en apoyar a Ucrania para que puedan recuperar el territorio que Rusia les arrebató. Asimismo señaló que la rebelión puede representar una “pérdida de enfoque” para los rusos, lo que podría beneficiar a Kiev en el campo de batalla.
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“Este ha sido un fracaso estratégico y devastador para Putin en prácticamente todos los frentes, posiciones económicas, militares y geopolíticas. Y, fundamentalmente, lo que se hace o deja de hacer por el pueblo ruso”, puntualizó en la entrevista.
Desde Estados Unidos observan la situación “muy cuidadosamente” al tratarse de un país importante como Rusia. El político de alto nivel indicó que la guerra está dejando a la economía de Moscú más débil, así como a su ejército. Además, unió a los ucranianos y sacó a Europa de la independencia de la energía rusa; “tema tras tema, lo que Putin ha tratado de evitar, lo ha logrado precipitar. Y como resultado, la posición de Rusia se ve muy disminuida”, puntualizó Blinken.
