El grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) de Sudán aseguró este sábado haber tomado el “control total” del Palacio Presidencial, donde reside el mandatario Abdelfatah al Burhan, así como el aeropuerto de Jartum, la capital, y varias bases militares tras un ataque al Ejército.
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Los paramilitares dirigidos por el general Mohamed Hamdan Daglo, conocido como ‘Hemedti’, hicieron un llamamiento a la población y a los soldados a levantarse contra el Ejército que se encuentra bajo el mando de Abdel Fatah al Burhan, dirigente de facto de Sudán desde el golpe de Estado del 25 de octubre de 2021.
Desde el golpe de Estado, los bandos de los generales Hemedti y Burhan se han sumido en una tensa confrontación por el poder que ha desencadenado en disparos y explosiones en varias zonas de esa nación.
Por su parte, el embajador estadounidense en Sudán, John Godfrey, instó al Ejército y a los paramilitares al cese “inmediato” de los enfrentamientos y aseguró que mantiene junto a su equipo refugiado en el interior de la embajada.
“La escalada de tensiones dentro del componente militar hacia el enfrentamiento directo es una circunstancia extremadamente peligrosa y hago un llamado urgente a los militares a que detengan los combates”, escribió en su cuenta de Twitter.
Mientras que el Secretario de Estado norteamericano, Anthony Blinken, consideró que la situación en la nación africana es “frágil” y que existe una “oportunidad real para luchar por una transición hacia un gobierno civil”, dijo en una rueda de prensa desde Vietnam.
La Embajada de Rusia en ese país también hizo un llamado al fin de los enfrentamientos e insistió a los ciudadanos rusos permanecer resguardados en sus casas, de acuerdo con un comunicado difundido por la agencia TASS.
