Oriana Barroso-. La leyenda de Hollywood Burt Reynolds, murió de un paro cardíaco a los 82 años en el hospital Jupiter Medical Center, Florida, según informe de su manager Erik Kritzer al portal de Hollywood Reporter.
Reynolds sufría problemas de corazón desde hace años y había sido sometido a una intervención en 2010.
Oriundo de Michigan pero vivió la mayor parte de su vida en Florida, donde triunfó como jugador de fútbol americano en la universidad, aunque un accidente en auto impidió que continuara con su carrera hacia la NFL.
Reynolds buscó el camino de la actuación en la ciudad de Nueva York, consiguiendo eventualmente papeles en Gunsmoke, Hawk y Riverboat, pero saltó al estrellato en la pantalla grande con Deliverance, en el año de 1972. Curiosamente, Reynolds rechazó los papeles de Han Solo en Star Wars, John McClane en Die Hard y Garret Breedlove en Terms of Endearment.
Al momento de su muerte se encontraba grabando la película Once Upon a Time in Hollywood, dirigida por Tarantino, la cual no se sabe si llego a completar pero está claro que este será el último legado de uno de los actores más importantes de Hollywood.
Reynolds participó en grandes producciones cinematográficas como Smokey and the Bandit, Cannonball Run y Boogie Nights, con la cual fue nominado al Oscar.
The Last Movie Star es una de sus últimas apariciones en la gran pantalla, encarnando precisamente a un actor en sus horas bajas que anteriormente había protagonizado las películas más taquilleras del cine.
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