La Agencia de las Naciones Unidas contra el Terrorismo se unió al pedido, también realizado por otras organizaciones, a que sean repatriados los 27.000 menores de edad varados en un enorme campamento en el noreste de Siria.
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“La terrible situación de los niños en (el campamento) Al Hol es uno de los problemas más urgentes del mundo hoy en día”, alertó el jefe de la Agencia, Vladimir Voronkov, en una reunión “informal” del Consejo de Seguridad de la ONU.
En el referido encuentro, el funcionario lamentó que los niños estén padeciendo de insalubridad, mala alimentación, así como encontrarse vulnerables “a ser atacados por miembros de milicias radicales (…) siguen varados, abandonados a su suerte”.
Al Hol, el mayor asentamiento para refugiados y desplazados sirios dentro del país, alberga actualmente a 62.000 personas, según funcionarios humanitarios de la ONU. Más del 80% son mujeres y niños, y muchos de ellos provienen de la organización terroristas autodenominada Estado Islámico (ISIS), y huyeron de ella cuando perdió su último bastión en Siria en 2019.