La Copa del Mundo que el capitán de la selección argentina, Lionel Messi, mostró en redes sociales triunfando en el estadio Lusail de Qatar, minutos después de conseguir la victoria frente a Francia, no es el trofeo auténtico de la FIFA, según se ha descubierto.
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Messi sin saberlo levantó una falsa copa en su icónico post del Mundial, que rompió el récord con más likes de la historia de Instagram, llegando casi a los 75 millones de reacciones. Se trató de una réplica artesanal elaborada por Paula Zuzulich y Manuel Zaro, una pareja de hinchas bonaerenses que habían llevado como una suerte de talismán, de acuerdo con lo reseñado por el diario El País.
El objetivo de los fanáticos era que los jugadores firmaran el trofeo falso que bajó al campo en manos de los aficionados y los propios jugadores. Fue su compañero de campo Ángel Di María quien le advirtió de que él tenía la verdadera al mirar la parte inferior del mismo.
“Antes del Mundial contactamos a gente que se dedica a hacer copas y tardó seis meses en fabricarla. Tiene el peso de la original, está hecha con resina y cuarzo en el interior y bañada con una pintura símil oro. Hay algunos detalles, marcas y relieves que no son similares, pero la diferencia es mínima”, aseguraron a la prensa los dueños del trofeo.
El sueño de Zuzulich y Zaro se hizo realidad, ya que consiguieron el autógrafo del centrocampista Leandro Paredes y el delantero Lautaro Martínez. “Vino personal de la FIFA y nos la pidió para confirmar que no era la original”, explicaron.
La verdadera copa se mantuvo en el campo durante poco tiempo y solo fue utilizada para las fotos de rigor con la albiceleste para luego ser retirada por los funcionarios de Giovanni Infantino, presidente de la FIFA.
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