El presidente de China, Xi Jinping reconoció que la epidemia del coronavirus, que hasta los momentos ha cobrado la vida de 41 personas tan solo en ese país, es una situación grave que se está acelerando en su contagio, por lo que llamó a su partido y Gobierno a fortalecer la unidad y tomar decisiones que la enfrente.
“El avance del coronavirus se acelera y enfrentamos una situación grave (…) ante la grave situación de una epidemia que se acelera, es necesario reforzar la dirección centralizada y unificada del Comité Central del Partido”, declaró a Jinping a medios de comunicación de su país.
Las primeras medidas tomadas por el gobierno de China han sido clausurar las ciudades con casos de contagio, entre Wuhan, epicentro de la neumonía viral.
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Asimismo, en un intento por contener el brote, se ordenó paralizar todos los servicios de autobuses interurbanos desde y hacia la capital china de Pekin en un intento que el brote no alcance el epicentro del país asiático, en medio de la celebración del año nuevo chino.