Este 7 de agosto, Gustavo Petro se juramentará como presidente de Colombia después de ganar las elecciones presidenciales el pasado 19 de junio.
Por primera vez, el país sudamericano tendrá un gobierno de izquierda junto a la vicepresidenta Francia Márquez, la primera persona afrodescendiente en ocupar este cargo.
La toma de posesión se realiza los 7 de agosto en homenaje a la Batalla de Boyacá, hecho histórico que marcó la independencia del país.
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El acto se realizará en la Casa de Nariño en Bogotá y Petro será acompañado por una importante comitiva internacional, donde destacan al menos 24 presidentes y líderes del mundo que ya confirmaron su presencia.
Entre los asistentes más destacados está el rey Felipe IV de España; el presidente de Chile, Gabriel Boric; Guillermo Lasso, mandatario de Ecuador; Mario Abdo, de Paraguay; de Argentina, Alberto Fernández, entre otros.
Ni Nicolás Maduro (Venezuela) ni Daniel Ortega (Nicaragua) fueron invitados.
Condecoración terrenal y posesión espiritual
El presidente saliente, Iván Duque, condecoró a Petro este viernes con la Orden de Boyacá Gran Collar, la Orden de San Carlos Collar y la Orden Nacional al Mérito Gran Cruz Extraordinaria.
Se trata de una condecoración protocolaria para demostrar la transición democrática, mismo acto que fue realizado hace cuatro años por el expresidente Juan Manuel Santos. De la misma forma, Álvaro Uribe Vélez condecoró a Santos tras su victoria en segunda vuelta presidencial en 2010.
Por otra parte, Petro recibió una posesión simbólica para los pueblos originarios de Colombia, viajando la Sierra Nevada de Santa Marta para asistir a una ceremonia “ancestral”.
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“En la posesión ancestral del presidente en el corazón del mundo. Ceremonia arhuaca”, escribió Petro en sus redes sociales.
Igualmente, Petro y la vicepresidenta Márquez asistieron este sábado a una “posesión popular y espiritual”, invitados por organizaciones sociales, populares, étnicas y ancestrales de la nación.
Según los organizadores, citados por la revista Semana, le entregaron a la dupla el “mandato popular” que recoge “el sentir del pueblo organizado y los aspectos generales del acumulado programático construido en múltiples espacios de encuentro”.
