Julio Castro, médico internista infectólogo y miembro del Equipo Humanitario País (EHP), y Huníades Urbina, médico pediatra, presentaron los resultados del estudio “Monitoreo Comunitario de la covid-19” realizado por el EHP con el fin de verificar, desde el punto de vista social, el acceso al sistema nacional de vacunación.
Castro detalló que para realizar la investigación se entrenaron a personas de las comunidades a lo largo del territorio venezolano para proceder a la recolección de la data que se efectuó desde el 25 de octubre al 26 de diciembre en 399 centros de vacunación del país.
La información arrojó que el 66,67 de los centros son fijos mientras que el 33,33% son temporales, lo que dificultaría la asistencia de la población. La mayoría de las sedes que se utilizan para la inoculación son ambulatorios con un 31,58%; 17,29% son establecimientos educativos; 13,03% comercios y 12,03% hospitales. El especialista destacó que no es recomendable asistir a centros que albergue pacientes contagiados con el virus.
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Por su parte, Urbina aportó que el horario de atención no es el mismo para todos debido a la falta de personal y solo un 4,26% presta el servicio las 24 horas, el 30,83% labora a tiempo completo (ocho horas diarias), y la mayoría (59,90%) está disponible medio tiempo en el turno matutino.
También se observó que el 64,91% de los puntos de vacunación si cuenta con la accesibilidad y atención a discapacitados, pero un 31,09% no posee.
El experto en salud destacó que la forma de convocatoria al inicio del sistema de vacunación se realizaba a través del Sistema Patria, el cual proporcionaba una fecha junto con la sede a la que debía asistir la persona. Sin embargo, al pasar los meses, dicho método no habría sido tan eficaz, por lo que para la fecha del estudio solo el 31% se vacunó por recibir el mensaje con la cita, mientras que el 69% asistió por voluntad propia.
También se conoció que las normas de distanciamiento en la mayoría de los centros no aplican, así como tampoco se tiene la prevención de consultar a las personas si presentan alguna sintomatología o alergia a algún medicamento que pueda ser contraproducente al recibir la vacuna.
