El 51,9% de los hogares de Venezuela sufrieron en 2023 una “pobreza multidimensional”, caracterizada por bajos ingresos, carencias en los servicios básicos, deterioro de la educación, entre otros aspectos, según la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi), cuyos resultados fueron presentados en Caracas.
El investigador Luis Pedro España, miembro del equipo que aplicó la encuesta en 10 regiones del país, explicó que en 2023 “se estabilizó” la pobreza, al subir solo 1,4% respecto a 2022, cuando el indicador mejoró en 15 puntos porcentuales.
Con este promedio, prosiguió, queda “bastante margen para mejorar” en la meta de llegar, al menos, al 35% de pobreza, el porcentaje “estructural” que tradicionalmente ha manejado el país.
Según el informe, elaborado por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), la actividad que más mantiene a la gente en la pobreza es la agricultura, pues 73,4% de los venezolanos que cultivan la tierra no puede cubrir sus necesidades básicas, mientras que 69,9% de quienes se dedican a las finanzas son “no pobres”.
Millones de pensionistas y obreros ganan un salario mínimo de 130 bolívares, equivalentes a 3,58 dólares, lo que deja a estas personas, sin posibilidad de cubrir gastos primarios como la alimentación y la salud.